Cómo organizar un almacén de repuestos o recambios
Para muchas empresas industriales, la gestión de repuestos es una parte esencial de su política de mantenimiento. Tanto si son de tamaño pequeño o mediano como si pertenecen a fabricantes dedicados al suministro de estas piezas, un reto común a organizar en un almacén de repuestos es conocer qué tenemos, dónde lo tenemos y cómo garantizar el nivel óptimo de stock.
Los almacenes de repuestos entran dentro de la categoría de instalaciones de almacenaje de productos pequeños, aunque cuentan con características que los hacen especiales.
Gestionar almacenes de repuestos cumpliendo objetivos
Por la naturaleza del producto que guardan, los almacenes de repuestos se ven sometidos a una presión extra que les exige:
- Clasificar y gestionar un elevadísimo número de referencias: generalmente son de tamaño pequeño, si bien no es extraño encontrar gran variedad de dimensiones. Las diferencias entre ciertas piezas pueden ser mínimas y, por ello, la información del inventario y la ausencia de errores en el registro es fundamental para dar un buen servicio.
- Conseguir una operatividad muy alta: las piezas de recambio suelen ser un bien demandado por una necesidad urgente. Por ello, los almacenes de repuestos deben responder en un plazo de tiempo muy corto.
¿Cómo lograr un control de inventario exhaustivo y una operativa ágil con tantos SKU y al nivel de servicio suficiente? No hay respuestas únicas, pero bien es cierto que ayuda (y mucho) contar con:
- Un sistema de gestión de bodegas que aglutine toda la información del inventario disponible y registre un histórico de stock preciso. Esto permite asignar los parámetros de rotación de existencias y así controlar el abastecimiento y evitar las perjudiciales roturas de stock.
- Personal formado que se maneje con comodidad en el ámbito del almacenaje y en el de los suministros industriales. Si estamos hablando de un almacén más pequeño, un problema habitual es el de una cierta desorganización del inventario. Para evitarlo, es aconsejable designar a un responsable, restringir el acceso al almacén y ser rigurosos registrando los cambios de inventario.
Estrategias para organizar un almacén de repuestos
A la hora de organizar un almacén de repuestos hay que encontrar una solución de compromiso entre la capacidad de almacenaje y la operatividad. Podemos clasificar las opciones más extendidas en función del método de picking o preparación de pedidos:
- Picking de hombre a producto: soluciones en almacenes de repuestos
Cuando el inventario es amplio y de características muy diversas, la ventaja de las soluciones de picking hombre a producto es que permiten preparar un gran volumen de pedidos a la vez. Para ello, muchos almacenes de repuestos se organizan siguiendo el método de picking por olas o wave picking.
Las estrategias más extendidas son:
- Sectorizar el almacén en una o varias plantas: cuando el picking se realiza de forma manual, las estanterías no suelen ser muy altas para facilitar las maniobras. Al añadir plantas, se multiplica la capacidad de almacenaje y se mantiene la accesibilidad a las referencias.
- Integrar transportadores de cajas que conecten las zonas de almacenaje e incluso las entreplantas con la de consolidación y expediciones. Así, se ahorra gran parte del tiempo dedicado a desplazamientos y los operarios pueden centrarse en el resto de tareas de picking para conseguir preparar más pedidos por hora.
- Utilizar estanterías para picking combinadas con pick to light: esta solución es la recomendada sobre todo para aquellos SKU con una rotación muy alta y muchas unidades por referencia.
- Picking de producto a hombre
En el apartado de soluciones de picking producto a hombre para almacenes de repuestos, los miniload o transelevadores para cajas destacan por aunar rapidez, precisión y capacidad de almacenaje.
Frente al modelo anterior, la principal ventaja es que se trata de un sistema que maximiza el espacio disponible y permite concentrar un gran número de referencias en un espacio restringido. Sin embargo, eso va en cierto detrimento del número de pedidos que podemos preparar simultáneamente.
Los miniload son almacenes compactos para cargas ligeras. Existen varios tipos dependiendo del rendimiento que alcancen: medio (150 cajas por hora en ciclos combinados), alto (entre 150 y 180) y muy alto (más de 250).
Entonces, ¿qué organización elegir para un almacén de repuestos o recambios?
Para organizar un almacén de repuestos es muy importante estudiar las características del stock y realizar una comparativa de sistemas y métodos teniendo en cuenta: coste total de la inversión, coste de manipulación, capacidad operativa y uso de la superficie. Con estos datos, será más sencillo implementar la solución idónea.
En Mecalux contamos con una amplia experiencia en el sector de los suministros industriales de piezas y recambios de todo tipo. Contacta con nosotros y te ayudaremos a organizar tu almacén de repuestos con éxito.